¿Quién es Ricardo Anaya Cortés?

El panista Ricardo Anaya logró que las fuerzas de izquierda, opuestas a AMLO, se unieran en una sola candidatura. Te presentamos la trayectoria y las principales propuestas del candidato de la coalición ‘Por México al Frente’

Político de profesión, con estudios en derecho y ciencias políticas, Ricardo Anaya Cortés, de 39 años, es el más joven de los actuales competidores a la presidencia mexicana.

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Su primer cargo público lo obtuvo con solo 18 años, cuando en 1997 fue nombrado director del Instituto Municipal de la Juventud en la capital queretana. Desde entonces su carrera política incluye la presidencia del Partido Acción Nacional (PAN), diputaciones estatales y federales, así como varios cargos en la administración del estado de Querétaro.

Su origen

Nacido en el municipio de Naucalpan, en el Estado de México, creció en Querétaro en el seno de una familia formada por la arquitecta María Elena Cortés de Palacio, y el ingeniero químico Ricardo Anaya Maldonado.

Posee una licenciatura en derecho, una maestría en derecho fiscal, y un doctorado en ciencias políticas y sociales. Está casado desde hace 13 años. Se considera a sí mismo como “un hombre de familia”, que se empeña en dejarle a sus tres hijos “un mejor país y un mejor mundo”.

Militante del PAN desde hace 18 años, su primera candidatura a un cargo público la obtuvo en el año 2000 como abanderado de ese partido al Congreso de Querétaro. En esa ocasión fue derrotado por el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

En la década pasada laboró en la administración del gobernador de Querétaro Francisco Garrido, de donde salió para ocupar una diputación plurinominal en el Congreso de esa entidad.

Hábil y acomodaticio, según revelan algunos de sus conocidos, fue coordinador de la bancada panista en la legislatura queretana, y presidente de su partido a nivel estatal.

Apadrinado políticamente por el entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa, en 2011 dio el salto a la administración pública federal como subsecretario de planeación en la Secretaría de Turismo.

Sus triunfos

En 2012 llegó a la Cámara de Diputados por la vía plurinominal, desempeñándose como miembro de las comisiones de Hacienda y Crédito Público, y de Presupuesto. Un año después fue elegido presidente de la mesa directiva de la Cámara baja.

Como legislador, se destaca su apoyo a las llamadas reformas estructurales propuestas por el presidente Enrique Peña Nieto. De manera específica, impulsó, junto con diputados del Partido Revolucionario Institucional, las reformas educativa, energética y de telecomunicaciones.

Fue adherente en la reforma al artículo 2 de la Constitución mexicana, aprobada en octubre de 2014, con la que se ampliaron los derechos políticos de las mujeres indígenas. Esos cambios a la carta magna establecieron que las prácticas comunitarias de los pueblos originarios de México no pueden limitar el derecho de las mujeres a votar y ser votadas.

También en 2014, Anaya logró ser nombrado presidente interino de Acción Nacional, relevando a Gustavo Madero. Un año después ganó la presidencia de ese instituto político al obtener el 81% de los votos, en unos comicios internos en los que derrotó al actual gobernador de Chihuahua, Javier Corral.

A finales de 2017 renunció al liderazgo panista para postularse como candidato a la presidencia mexicana, logrando ser apoyado no solo por el PAN, sino también por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC), que en conjunto integran la coalición Por México al Frente.

Sus fracasos

Como diputado federal, Ricardo Anaya no logró que se aprobaran la mayoría de las iniciativas que presentó en la Cámara baja. Entre estas se destacan la propuesta para que el Congreso expidiera una ley de evaluación de los servidores públicos, y el planteamiento para que la Auditoría Superior de la Federación se convirtiera en un órgano constitucionalmente autónomo.

También se le rechazó una iniciativa que buscaba hacer obligatoria la aplicación de un sistema de evaluación de indicadores de gestión gubernamental.

A su vez, como dirigente del PAN, se enemistó con el expresidente Felipe Calderón y con su esposa, la actual candidata presidencial independiente Margarita Zavala, quienes lo acusaron de utilizar la estructura partidista para promocionarse como aspirante a la presidencia del país.

Ese mismo señalamiento fue esgrimido por un grupo de cinco senadores, autodenominados los “Rebeldes del PAN”, quienes en octubre de 2017 hicieron públicas sus diferencias con Ricardo Anaya.

Sus crisis

El momento más difícil que hasta ahora ha enfrentado Ricardo Anaya Cortés como aspirante presidencial es el escándalo generado por una investigación de la Procuraduría General de la República (PGR), en un caso de presunto lavado de dinero.

Al político se le señala de haber participado en una operación inmobiliaria que se habría llevado a cabo con recursos de procedencia ilícita. Si bien Ricardo Anaya no está acusado de haber cometido ese delito, la PGR informó –desde febrero pasado- que el candidato formaba parte de una investigación por haber vendido una bodega a una persona que no ha podido probar el origen de sus ingresos.

Como respuesta, Anaya acusó al gobierno federal de utilizar de manera facciosa a una institución como la PGR, con el objetivo de afectar su candidatura presidencial. “Dolosamente omitieron señalar que a quien están investigando es a otra persona y no a mí. La PGR se ha prestado a la guerra sucia del PRI”, aseveró.

Posteriormente, la fiscalía mexicana difundió un video en el que se observa a Ricardo Anaya, acompañado de sus abogados, en la recepción de las oficinas de la PGR a donde había acudido el panista para entregar un escrito.

La Procuraduría argumentó que las imágenes se difundían por “no contravenir ninguno de los principios del debido proceso, (y) la salvaguarda de la presunción de inocencia”. La institución agregó que el video tampoco violentaba la integridad, ni la privacidad del candidato.

Considerada como una persecución política, más que como una investigación de carácter penal, 60 intelectuales publicaron una carta dirigida al presidente Enrique Peña Nieto exhortándolo a cesar “el uso del Ministerio Público para perjudicar al candidato presidencial del Frente por México”.

En ese tenor, tanto el Instituto Nacional Electoral (INE) como el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) consideraron que el video difundido por la PGR afectó la equidad de la contienda electoral.

De hecho, el pasado 12 de abril, la Sala Especializada del Tribunal Electoral informó que se acreditaron “el mal uso de recursos públicos y la afectación a la equidad de la contienda electoral” por parte de funcionarios de la PGR.

Principales propuestas

Ricardo Anaya asegura que, de llegar a la presidencia, encabezará un gobierno de coalición “en el que la participación ciudadana sea la base de la toma de decisiones”.

Considera que “el régimen actual está agotado”, por lo que se requiere “un nuevo esquema que permita el avance nacional a través de la construcción de una ciudadanía fuerte, crítica, informada y participativa”.

De manera específica, propone cinco líneas de acción: Fortalecimiento del Estado de derecho; Consolidar una sociedad de derechos en la que se incentive la movilidad social, se respete la dignidad humana y la libertad personal; Incluir como eje central de las políticas de gobierno un enfoque transversal de igualdad sustantiva de género; Fortalecer el federalismo estableciendo pesos y contrapesos entre los poderes; y Fortalecer el sistema democrático.

En materia de seguridad, plantea reestructurar la estrategia de combate al crimen organizado, haciendo énfasis en la prevención del delito y en el respeto a los derechos humanos.

Propone también una fiscalía independiente, y hace suya la iniciativa de grupos de la sociedad civil que, desde 2017, exigen una reforma al artículo 102 de la Constitución, a fin de lograr la verdadera autonomía de la Fiscalía General, que debe sustituir a la actual PGR.

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