Las verdaderas historias sobre la creación de San Valentín

¿Te has preguntado de dónde viene el San Valentín? ¿A quién se le ocurrió regalar flores el 14 de febrero? ¿Por qué existen corazones rojos?

La historia no tiene que ver con cenas románticas, osos de peluche, globos o chocolates. Es más bien, una tradición construida a partir de muchas creencias e intereses.

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Una de estas historias es la del festival romano Lupercalia, en el que los hombres sacrificaban una cabra a mediados del mes de febrero. Con la piel del animal azotaban a las mujeres. No parece nada romántico, pero los historiadores aseguran que ellas lo aceptaban y toleraban. Creían que esta práctica podría volverlas más fértiles.

Además de los golpes, los romanos crearon un sistema de lotería, a través del cual determinaban al azar con qué mujer se acostarían durante las fiestas.

Los cristianos decidieron aparecer para poner un poco más de ropa en la historia. Fue en su intervención cuando apareció San Valentín.

Ahora bien, el santo se presta a confusiones y por esta razón, la iglesia católica decidió eliminar el día de San Valentín de las fiestas oficiales. Dentro de la historia existen dos Valentine, ambos asesinados por Caludio II. El primero es el que todos conocemos por haber desafiado la prohibición de los matrimonios.

Claudio II había decretado la prohibición del matrimonio, pues impedía que muchos hombres se unieran al ejército. El sacerdote Valentine lo desobedeció y casó a muchas parejas jóvenes. Esta actitud le valió ser decapitado, un 14 de febrero.

Otro de los Valentine fue un obispo de Terni, Italia, quien también murió decapitado. ¿Coincidencia? o ¿simplemente era la moda de la época?

Entonces llegó a la historia el momento del Papa Gelasio quien, en el siglo V, decidió unificar las tradiciones romanas de la Lupercalia con las de San Valentín, con el fin de evitar las fiestas paganas.

Quien por fin encontró la connotación sentimental de este día fue el historiador Jack B. Oruch. Él descifró, a través de los poemas de Geoffrey Chaucer, que el sentido romántico venía de la creencia medieval de que la primavera comenzaba el 14 de febrero.

 

¿Y quién no se va a sentir enamorada cuando sale el sol?

Así progresó la amalgama de creencias y festejos, hasta que Hallmark comenzó con la producción masiva de tarjetas de amor. Fue entonces, en 1913, que se consolidó como el mayor evento de consumismo.

Ahora que ya entiendes la estructura ecléctica del día de los enamorados, puedes sentirte libre para agregar o quitar costumbres a tu festejo de San Valentín.

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