Las lluvias afectaron de manera contundente a la región donde el GP de Italia tendría lugar
El Gran Premio de Italia de la Fórmula 1 que debía celebrarse este fin de semana en la región de Emilia-Romaña, en el norte del país, se canceló el miércoles debido a las letales inundaciones en la zona.
La F1 dijo que tomó la decisión por motivos de seguridad y para evitar cargas adicionales para los servicios de emergencia, tras consultas con las autoridades políticas italianas.
“Se ha tomado la decisión porque no es posible celebrar el evento de forma segura para nuestros aficionados, los equipos y nuestro personal, y es lo correcto y lo responsable dada la situación que enfrentan los pueblos y cuidadaes de la región», explicó la F1 en un comunicado.
“Es una tragedia ver lo que ha ocurrido en Ímola y en Emilia-Romaña, la ciudad y la región donde crecí, y mis pensamientos y oraciones van para las víctimas de las inundaciones y las familias y las comunidades afectadas”, dijo el presidente y CEO de la F1 Stefano Domenicali.
Al menos cinco personas murieron por las inundaciones y otras 5.000 han sido evacuadas, mientras que el suministro eléctrico y las redes de telefonía celular se han visto gravemente afectadas. Se esperaba que miles de fanáticos acudieran al circuito el viernes para las sesiones de entrenamiento previas a la carrera, lo que añadiría más presión a un sistema de transporte ya de por sí saturado.
“Quiero expresar mi gratitud y mi admiración por los increíbles servicios de emergencia que están trabajando sin descanso para ayudar a quienes lo necesitan y aliviar la situación. Son héroes y toda Italia está orgullosa de ellos
“La decisión que se ha tomado es la correcta para todos en las comunidades locales y en la familia de la F1 ya que tenemos que garantizar la seguridad y no crear cargas adicionales para las autoridades mientras lidian con esta situación horrible”, afirmó Domenicali.
Esta es la segunda cancelación de la temporada. El Gran Premio de China, previsto para abril, se canceló en diciembre ante la preocupación por las restricciones relacionadas con la pandemia del coronavirus.
Si el Gran Premio de Ímola no se reprograma, algo poco probable dado el apretado calendario de la competición, la temporada tendrá 22 pruebas, las mismas que el año pasado, en lugar de establecer un nuevo récord con 23.
El Gran Premio de Mónaco se disputará el 28 de mayo y el de España, una semana más tarde.