Acumulamiento de animales se vuelve un problema más común en Aguascalientes

De acuerdo con la Secretaría de servicios Públicos Municipales de Aguascalientes, se han detectado casos de hasta 50 animales en condiciones de hacinamiento, los cuales ya representan un problema de salud pública.

Adrián Luévano llegó a Aguascalientes hace tres años para trabajar, y al poco tiempo de vivir en la ciudad  decidió traerse a su mejor amiga, una perra chihuahua que tenía en casa de su mamá en Zacatecas.

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“Yo me traje a Lolis porque siempre estuvo conmigo desde que yo vivía en Zacatecas, la había dejado con mi mamá, pero no era lo mismo”.

Mientras trabajaba en una comunidad se percató de que una familia intentaba lanzar a la calle a una pitbull cruzada con labrador, tan sólo por el hecho de ser perra, su destino, según los lugareños sería terminar con un peleador de perros, quien la entrenaría  para participar en los enfrentamientos clandestinos.

Adrián relata que no lo dudó, y tomó a la cachorrita para llevársela a vivir con él en un pequeño departamento  con  patio no muy grande.

“No podía soportar la idea de que terminaría en peleas clandestinas por lo que pedí que me la regalaran”.

Cinco meses después, y luego de ser desalojado  del departamento por la queja de los vecinos, Adrián comenzó a vivir en un lugar un poco más grande con dos patios.

Adrián señala que durante una exposición encontró a un grupo de rescatistas de animales, quienes le mostraron  a un viejo pastor inglés que tenía  una historia terrible:  había sido encontrada casi muerta en un lote baldío luego de que sus dueños la abandonaran en la calle, por lo que decidió darle una hogar.

“Nunca había adoptado a un perro, dicen que son muy agradecidos, además su historia me conmovió mucho”.

Con los tres perros, la situación de limpieza y alimentación se fue agravando, pero aun así el joven vivía feliz, pero su amor por ellos no terminó, ya que a los pocos meses vio cómo dos personas se deshacían de una bóxer.

La razón: por ser hembra y de color blanco, ya que este tipo de animales no se pueden comercializar fácilmente. Adrián pagó 200 pesos por el animal.

Antes de terminar el año, Adrián llegó a acumular hasta cinco perros en espacios reducidos, enfrentándose a diversas problemáticas generadas por el cúmulo de animales, malos olores, ladridos y vecinos no amantes de los animales que provocaron que el joven se cambiara cinco veces de casa en menos de un año. 

“En Aguascalientes la gente no te renta una casa si tienes animales, es muy difícil, en un departamento me corrieron porque no querían perros, pero el señor jamás especificó en el contrato que rentaba sin animales, me acababa de cambiar y me corrió”.

De acuerdo con Ana Zavala Enríquez, presidenta de Amigos Pro Animal en Aguascalientes, el problema de acumuladores de perros en Aguascalientes ha ido incrementado, debido a que  ha crecido el número de rescatistas quienes muchas veces no se percatan que existe una línea muy delgada entre ser rescatista y un acumulador de animales.

“Esta problemática ha  crecido a raíz de que existe cada vez más gente rescatista que se compadece por los animales, pero existe una línea muy delgada entre un rescatista y un acumulador de animales que llegan a un momento en el que sienten tanta necesidad por estar rescatando animalitos y empiezan a limitar sus capacidades para darlos en adopción, de lo que pueden invertir para esterilizarlos y se empiezan a cruzar entre ellos, eso es un acumulador de perros”.

Los problemas de limpieza, alimentación son frecuentes en los acumuladores de perros, quienes llegan a sentirse frustrados por no cumplir con las necesidades de los animales. 

Existe una línea muy delgada entre ser rescatista y un acumulador de animales. Los problemas de limpieza y alimentación son frecuentes

“La persona se empieza a frustrar porque no puede darle la atención que necesitan a  los animalitos, no puede darles la comida que requieren, empieza a perder la noción de la limpieza, los pisos empiezan a verse sucios, llenos de desechos, sus muebles también se estropean y en ese momento vemos que la persona también empieza a alejarse de su familia porque ya no pueden con el problema y aquí es donde ya se necesita ayuda sicológica”, aseguró. 

En colonias como Haciendas de Aguascalientes  y al oriente de la ciudad es en donde se presenta la problemática con mayor frecuencia

“Hemos encontrado varios casos de acumuladores de perros aquí en Aguascalientes, de gente que vive en casas no muy grandes donde tienen de 15 a 20 perros”, comentó.

Los acumuladores de perros tienen una buena intención de cuidar a los animales, por lo que las organizaciones  protectoras de animales ayudan a la persona dando en adopción a los perros, pero les permiten conservar algunos.

Ana Zavala reconoció que la problemática rebasa las capacidades de la organización, por lo que los casos son atendidos poco a poco para que sea más eficiente la ayuda.

En Aguascalientes se estima que existen cerca entre 100 y 150 mil animales abandonados, y dentro la cifra se encuentran aquellos animales que viven en las azoteas.

El secretario de Servicios Públicos Municipales, Héctor Anaya, reconoció que los acumuladores de perros se convierten en un problema de salud pública.

“La ley de protección a los animales para Aguascalientes establece la participación ciudadana, en el caso particular de organizaciones protectoras de animales o personas físicas que se dedican a rescatar animales en la vía pública, todos contribuyen con los objetivos que están dispuestos en la ley, lamentablemente sí ocurre que hay algunas personas que no tienen el espacio suficiente para que un número de animales estén con los cuidados para que tenga condiciones dignas de sobrevivir”, dijo.

Al mes, la Secretaría de Servicios Públicos Municipales recibe de tres a cinco reportes de acumuladores de perros. 

“Llegan reportes de los ciudadanos de vecinos de las propiedad habilitadas como refugio o albergues, los animales no están en buenas  condiciones, sin alimentos; incluso algunos han muerto y los encuentran en estado de descomposición”.

Sanciones que van desde una amonestación por escrito hasta multas económicas, se pueden llegar a poner a los acumuladores de perros, sin embargo, las autoridades aseguran que prefieren atacar el problema con concientización.

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