En su vuelta a la TV, con el primer episodio de la séptima entrega de la serie The Walking Dead no sólo el malvado Negan impactó a la audiencia reventando cráneos sino también aplastó récords con 17 millones de televidentes tan sólo en Estados Unidos, con un rating de 8.4, entre adultos de 18 a 49 años de edad en ese país.
Así lo difundió Entertainment Weekly, revista que de paso destacó que el capítulo The Day Will Come When You Won’t Be (El día llegará cuando tú no estés) se erigió como el segundo más visto en la historia del drama sobre el apocalipsis zombie, sólo detrás de la premiere de la quinta entrega (estrenada el 12 de octubre de 2014), que fue seguida por 17,3 millones de espectadores e impuso un 8,8 de rating.
El sitio destacó que la cifra del episodio de AMC, transmitido simultáneamente el pasado domingo a Estados Unidos y América Latica por Fox, es mayor al del Sunday Night Football de la NFL, emitido por la cadena NBC.
Además la edición especial y extendida de Talking Dead fue la mejor de la historia del formato, con un total, 7,6 millones de espectadores que vieron al reparto de TWD reflexionar sobre el derroche de sangre y violencia explícita del capítulo emitido inmediatamente antes, donde los personajes de Abraham (Michael Cudlitz) y Gleen (Steven Yeun) terminaron reventados por Lucille, el bate de beisbol forrado con alambre de púas del líder de Los Salvadores, Negan (Jeffrey Dean Morgan) ante la sumisión de Rick (Andrew Lincoln) y los sobrevivientes de su cautivo grupo.
Todo indica que la séptima entrega será la temporada más traumática y cruenta de la franquicia de Robert Kirkman, aunque para alivio de los fans no será la última ya que recientemente se confirmó que habrá una octva y ahora ante el éxito ya se especula la realización un décimo ciclo.