Un incendio intencional hecho por un vigilante dejó al menos cuatro niños muertos y varios heridos, informó el Ministerio Público, en un episodio calificado como una tragedia por el presidente Michel Temer

Un incendio, aparentemente intencional, en una guardería en el estado de Minas Gerais, al sureste de Brasil, causó la muerte de cuatro niños, así como heridas a otros 20.

El Instituto Médico Legal de la ciudad informó que murieron en el ataque: Ana Clara Ferreira Silva, Luiz Davi Carlos Rodrigues, Juan Pablo Cruz dos Santos y Juan Miguel Soares Silva; todos de 4 años.

Según la información de la Policía Militar y del Cuerpo de Bomberos, el vigilante del Centro Municipal de Educación Infantil “Gente Inocente”, en el Barrio Rio Novo, arrojó alcohol a los niños y a sí mismo, para después prenderles fuego.

Conforme al medio local Globo, en ese momento había 75 niños y 17 empleados en la escuela.

El atacante, identificado como Damian Soares dos Santos, de 50 años, llegó a ser hospitalizado con quemaduras en todo el cuerpo y murió tres horas más tarde.

La alcaldía informó que Soares dos Santos trabajaba en el lugar desde 2008. Tomó las vacaciones de verano y, al regresar al trabajo, en el mes de septiembre, alegó un problema de salud y fue incapacitado.

El hombre asistió a la guardería este jueves a entregar el certificado médico y cometió el crimen. No se ha informado cuál era el problema de salud que padecía el vigilante.

Inicialmente, el Ayuntamiento de Janaúba, donde ocurrieron los hechos, informó la muerte de una de las profesoras de la guardería, hecho corroborado por su familia.

Sin embargo, el hospital comunicó que la profesora está viva y es una de las personas heridas que permanecen internadas.

De acuerdo con el Hospital Regional de Janaúba, cerca de 40 personas fueron atendidas en dicha unidad tras el suceso, de las cuales 25 de ellas fueron ingresadas con quemaduras y 15, que estaban en estado de shock, ya fueron dadas de alta.

Entre los pacientes internados, 14 son niños con edades entre los 4 y 5 años; también hay empleados de la guardería.

Todas las personas hospitalizadas tienen quemaduras en más del 20 por ciento del cuerpo, y 15 respiran con la ayuda de aparatos.

“Lamento intensamente esta tragedia con los niños en Janaúba. Quiero expresar mi solidaridad con las familias. Yo, que soy padre, imagino que esta debe ser una pérdida dolorosísima. Esperemos que estas cosas no se repitan en Brasil”, expresó el presidente Michel Temer en un mensaje en Twitter.