El 49 por ciento de los votantes estadunidenses considera que Donald Trump es racista, de acuerdo con una nueva encuesta de la Universidad Quinnipiac
Un 49 por ciento de los votantes estadunidenses consideró que el presidente estadunidense Donald Trump es racista, mientras otro 47 por ciento cree que no lo es, según una nueva encuesta de la Universidad Quinnipiac.
Los porcentajes se mantienen sin variación frente a los de una consulta similar de febrero pasado, en la que el 49 por ciento de los votantes dijo que Trump era racista y el 46 por ciento opinó que no.
En el nuevo sondeo, un 44 por ciento de los votantes indicó que “las creencias racistas” de Trump se manifiestan en su política de inmigración; mientras que 50 por ciento consideró que el mandatario tiene “un interés sincero en controlar nuestras fronteras”.
El 50 por ciento de los encuestados manifestó que la política de separar a los niños de sus padres en la frontera constituía una violación de los derechos humanos.
Desde la promulgación de la política “tolerancia cero” para quien cruce la frontera de manera ilegal, Trump y sus colaboradores han promovido afirmaciones falsas para obtener apoyo, asociando a la inmigración con altas tasas de criminalidad a pesar de que no hay evidencia que respalde las aseveraciones de que los indocumentados cometen más crímenes que los estadunidenses.
Sólo el 11 por ciento de los votantes republicanos en la encuesta de Quinnipiac consideró que Trump es racista; el 22 por ciento cree que el presidente ha estimulado a las personas racistas a expresar sus creencias de manera pública.
El número de crímenes de odio en Estados Unidos registró un aumento en el primer año transcurrido, tras la elección de Trump como presidente, el primer incremento en más de una década.
Trump niega ser racista a pesar de hacer una serie de comentarios y sentimientos racistas y xenófobos, desde sugerir que México está enviando violadores y criminales a Estados Unidos, hasta argumentar que la violencia supremacista blanca en Charlottesville es un asunto de “ambos lados”.
El mandatario estadunidense también ha criticado a los deportistas afroamericanos que se niegan a pararse durante la entonación del himno nacional en protesta por la brutalidad policial y la desigualdad racial.