La oposición venezolana prometió este lunes intensificar las protestas para forzar al mandatario socialista a retroceder en su intento de convocar a una Asamblea Constituyente que reescriba la carta magna
Alentada por la masiva votación en un plebiscito contra el gobierno de Nicolás Maduro, la oposición venezolana prometió este lunes intensificar las protestas para forzar al mandatario socialista a retroceder en su intento de convocar a una Asamblea Constituyente que reescriba la carta magna.
Y, como primeras medidas, convocó a un paro cívico de 24 horas el jueves y dijo que, a través de la Asamblea Nacional, donde tiene mayoría, nombrará el viernes a los miembros del Tribunal Supremo de Justicia.
«Si el régimen insiste en desconocer la decisión de los venezolanos, haremos todo para hacer respetar su soberanía», dijo el diputado Freddy Guevara, leyendo un manifiesto acordado por la treintena de partidos de oposición.
«No vamos a permitir que la destrucción de Venezuela se concrete. Es todo un país que de manera abrumadora rechaza el régimen de Maduro», agregó el primer vicepresidente de la Asamblea Nacional revelando que, según el total de actas escrutadas, 7.6 millones de venezolanos votaron en el plebiscito del domingo.
En el plebiscito del domingo, además de rechazar la propuesta de Maduro de reescribir la carta magna, los votantes dijeron «Sí» a la intervención de las Fuerzas Armadas para «hacer cumplir la Constitución» y a la renovación de los poderes públicos.
La oposición lleva casi dos años presionando por la salida de Maduro, cuyo mandato termina a inicios del 2019, y lo culpa de la crisis que atraviesa el país, con una inflación de tres dígitos y escasez de alimentos y medicinas.
«Aunque el resultado no sea jurídicamente vinculante debe llevar al presidente Maduro a replantearse la convocatoria de la Constituyente», dijo la viceportavoz del Ministerio de Exteriores de Alemania, Maria Adebahr.
Sin embargo, analistas creen poco probable esta posibilidad a pesar de que la oposición dijo el lunes que si Maduro desiste de su intención, podrían sentarse a negociar.
«Maduro probablemente seguirá adelante con sus planes, preparando el escenario para un prolongado enfrentamiento político y agravando los disturbios que, eventualmente, lleven a una transición negociada», dijo la firma Eurasia en una nota.
El oficialismo critica la consulta
Tras divulgarse los resultados, el oficialismo trató de restarle méritos a la consulta opositora, pese a que movilizaron 100,000 personas más que las que votaron por Maduro en las presidenciales del 2013.
Miembros del partido de gobierno aseguraron que la oposición infló sus números de participación, aprovechando que ninguna institución estatal supervisó el plebiscito. Además, se quejaron de que la destrucción de los cuadernos electorales impedirá contrastar los resultados.
«Hasta los canguros votaron en Australia», se burló Jorge Rodríguez, quien luego mostró un video donde aseguró se ve a una persona votando hasta 17 veces, comprobando el «fraude» opositor.
Horas antes de conocerse los números finales, Maduro, un exchofer de autobús de 54 años, insistió en que la elección para los 545 constituyentes se hará «llueve, truene o relampaguee».
«Le hago un llamado a la oposición. Que interpreten bien qué ha pasado en las calles hoy (domingo)», dijo el mandatario en referencia a lo que calificó como un «masivo» simulacro para la elección de la Asamblea Nacional Constituyente.