La presunta intromisión de la Iglesia en la elección a gobernador en Aguascalientes fue uno de los motivos por los que el PRI y sus aliados, además del partido Movimiento Ciudadano (MC) impugnaron el triunfo de Martín Orozco, abanderado panista.
En el caso de la alianza “Aguascalientes grande y para todos”, que encabezaba el tricolor, el recurso también contempla rubros como un supuesto rebase de tope de gastos de campaña e intervención de funcionarios municipales a favor de los abanderados del PAN, por lo que piden que repitan los comicios.
«Excedieron los topes de gastos de campaña en un 20%», sostuvo Alberto Solís Farías, secretario general del partido en la entidad.
Aunque aludieron a las publicaciones y manifestaciones en la que la iglesia católica pidió el voto de castigo contra el PRI, los dirigentes dijeron no sentirse castigados.
Por otro lado, aunque no participó en la elección a gobernador, Movimeitno Ciudadano informó en un comunicado que su representante ante el Instituto Estatal Electoral (IEE), Abel Sánchez Garibay, presentó un escrito, así como videos y otros documentos que acreditan cómo los integrantes del clero aguascalentense pidieron ir en contra de los candidatos supuestamente ajenos a su concepto de “familia natural”.
“Consideramos que eso constituye un atentado a nuestras leyes y a la equidad electoral, pues todo desembocó en el triunfo del panismo. De manera repetitiva y homofóbica descalificó el trabajo de legisladores locales y federales debido a sus posturas en pro de los derechos”, afirmó el representante.
La Diócesis, acusó, se aprovechó de la preponderancia de la religión católica en la población de la entidad para salvaguardar intereses propios e interferir en cuestiones del Estado.
“El artículo 130 de la Constitución Política ha sido violentado. Movimiento Ciudadano no permitirá que grupos opuestos a las conquistas históricas propicien retrocesos en perjuicio de una población que demanda política constructiva y de altas miras”, se explica en el documento.
Cabe señalar que dicho instituto político está en riesgo de perder su acreditación a nivel local, con lo que dejaría de acceder a prerrogativas locales.
El partido contendió sin candidato a gobernador y fue señalado de estar apoyando de facto a la candidata del PRI, aunque nunca lo reconoció abiertamente.
Para la alcaldía, postuló a Felipe González Ramírez, hijo del exgobernador panista Felipe González González.
Ambos recursos pasarán a a Sala Administrativa y Electoral la próxima semana y, de ser recurrida la sentencia que ese organismo emita, irá a la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
*Con información de Expansión