Ser veterinario significa aprender y enfrentar cada día lecciones profundas de amor

Salvar vidas, interpretar aullidos, sentir y conocer el instinto, tener muchos amigos peludos y de plumas, ser veterinario significa aprender y enfrentar cada día lecciones profundas de amor.

Así describe la gran labor del Médico Veterinario Zootecnista Francisco Javier Damián Olvera, quien desde hace 27 años ha prestado sus servicios en el Departamento de Salud y Bienestar Animal (DSyBA) del municipio de Aguascalientes.

A sus 59 años de edad, Damián ha atendido a miles de animalitos de compañía, lo que le ha permitido adentrarse en un mundo en el que ha logrado entender lo que dicen los ojos de un perrito o de un gatito, lo que indica el meneo de la cola o los mordiscos de agradecimiento al momento de cuidarlos.

Este gran amigo de los animales, egresado de la Universidad Autónoma de Aguascalientes ha contribuido con sus conocimientos desde el DSyBA con atenciones como esterilización, vacunación antirrábica  y atención integral. La implementación de estas medidas ha permitido que Aguascalientes se haya mantenido libre de rabia durante los últimos 30 años.

“Ahora estoy por jubilarme, pero creo que estoy dejando una buena aportación en la salud de los aguascalentenses; ya vendrán nuevas generaciones a continuar con esta noble labor de promover la tenencia responsable de las mascotas. La persona que adquiere una mascota, ya sea por adopción, compra o regalo, tendrá un amigo leal y seguro por muchos años”, señaló.