El fiscal del distrito sur de Nueva York, Preet Bharara, anuncia la apertura de una investigación criminal sobre asuntos relevantes vinculados con el escándalo
Estados Unidos abrió una investigación criminal sobre las filtraciones de los papeles de Panamá, que han destapado miles de empresas y activos opacos de personalidades de todo el mundo, según una carta del fiscal del distrito sur de Nueva York, Preet Bharara.
En la misiva, dirigida al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, en inglés), con sede en Washington y uno de los artífices de las filtraciones, el fiscal informa de la apertura de “una investigación criminal” sobre asuntos “relevantes” vinculados con los papeles de Panamá.
En la carta, Bharara solicita poder mantener una reunión “tan pronto como sea posible” con algún representante del ICIJ “involucrado en el proyecto” de los papeles de Panamá para hablar acerca de la investigación.
La periodista argentina Marina Walker, subdirectora del ICIJ, dijo hoy que la organización ha recibido la notificación del fiscal Bharara, fechada el 3 de abril, el mismo día en el que salieron a la luz las filtraciones.
El escándalo de los papeles abarca más de 11.5 millones de documentos del bufete panameño Mossack Fonseca, especializado en la gestión de capitales en paraísos fiscales, y afecta a más de 140 políticos y altos funcionarios de todo el planeta, entre ellos varios jefes o ex jefes de Estado, o a sus familiares.
La carta oficial no especifica sobre qué aspecto de las filtraciones Estados Unidos ha decidido abrir una investigación y tampoco incluye una citación judicial para obligar a testificar a miembros del ICIJ o exigirles la entrega de los millones de documentos obtenidos de la firma panameña.
De hecho, el acceso a los documentos sigue limitado a un grupo de medios internacionales, entre los que se incluye el diario británico The Guardian o el alemán “Süddeutsche Zeitung”.
Cuando el escándalo estalló a comienzos de este mes, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, alertó contra el “gran problema global” de la evasión de impuestos.