“México y Texas han construido un caso convincente para los beneficios del libre comercio”, escribió Meade en un artículo publicado este martes en el periódico The Dallas Morning News
El candidato presidencial de la coalición ‘Todos por México’, José Antonio Meade, defendió hoy en un artículo periodístico los beneficios del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), al ponderar la extensa relación comercial entre Texasy su país.
“México y Texas han construido un caso convincente para los beneficios del libre comercio”, escribió Meade en un artículo publicado este martes en el periódico The Dallas Morning News, donde señaló que México es el mercado de exportación más grande de Texas y Texas es el principal socio comercial del país.
El aspirante presidencial por la coalición conformada por los partidos PRI, PVEM y Nueva Alianza, apuntó que el libre comercio “será uno de los temas cruciales en las urnas en un par de semanas en las elecciones presidenciales de México”.
“En el Súper Domingo 1 de julio, los mexicanos seleccionarán un presidente. Parte de esa decisión será elegir a alguien que comprenda la importancia de la integración con la economía de Texas y que tenga la visión y la experiencia para llevar la relación a una fase posterior al TLCAN, aún más competitiva”, señaló.
“La elección es una decisión binaria sobre lo que queremos para los próximos 50 años de México”, destacó.
¿Continuamos avanzando en un México hacia el exterior, construyendo certidumbre, atrayendo una mayor inversión y creando más empleos, como he estado defendiendo? ¿O elegimos las ideas anticuadas y erróneas que nos devolverán a un México centrado en el estado proteccionista y autoritario?, preguntó.
“El futuro de América del Norte y de las relaciones entre México y Estados Unidos no pueden permitirse la improvisación”, subrayó.
Meade escribió que después de su experiencia como secretario de Relaciones Exteriores, “soy plenamente consciente de las altas apuestas en juego”.
“Estoy preparado y listo para guiar a México en un mundo donde poderosos actores estatales y transnacionales influyen en la agenda global, ¡en un mundo cada vez más complejo e incierto!”, aseveró.
En ese sentido, escribió, “deberíamos pensar en México y Texas como una sola región, porque como región tendremos éxito o fracasaremos juntos. Nuestro proceso de integración ha demostrado que un México y un Texas abiertos y democráticos pueden cumplir”.
Meade explicó luego tres formas en que Texas será parte central de sus políticas públicas en caso de llegar a la Presidencia de México.
Será, dijo, a través de un TLCAN modernizado. “Comparado con mi principal oponente, siempre he apoyado firmemente un NAFTA mejorado y actualizado”.
“En un momento en que la incertidumbre sin precedentes y las decisiones unilaterales dificultan el comercio, debemos aprovechar nuestra ubicación geográfica excepcional al construir México como un centro logístico global”, manifestó.
Apuntó que incluirá también en sus políticas publicas la participación de esta entidad en la “implementación de la histórica reforma energética de México”.
“México ya es el mayor mercado de exportación de productos refinados de petróleo de Texas. Si la palabra de moda populista de la oposición está “deshaciendo” la transformación desatada por la reforma energética de 2013, lo mío es lo contrario: una mayor apertura. Apoyo más inversión privada, con el estado de derecho y la transparencia en el núcleo”, afirmó.
“Pondremos a punto la reforma para que el nuevo modelo energético de México pueda satisfacer las demandas del siglo XXI”, abundó.
Señaló también que buscará cerrar la brecha de energía norte-sur. “El sur de México y América Central necesitan un mayor acceso a la energía y Texas es el socio ideal. Si logramos este objetivo juntos, pasará a la historia como una gran historia de éxito del desarrollo regional”.