Tras el polémico tuit publicado por el primer minsitro Benjamín Netanyahu
El presidente de Israel, Reuvén Rivlin, pidió a Enrique Peña Nieto dejar atrás la crisis diplomática entre ambos países desatada el fin de semana por el polémico tuit del primer ministro, Benjamín Netanyahu, disculpándose por lo que calificó de un mero «malentendido».
«No tenemos ninguna intención de comparar entre la situación de seguridad de Israel y las necesidades que se desprenden de ella, y la situación en la que estén los países amigos de Israel», aclaró Rivlin a su interlocutor en una llamada telefónica programada de antemano, y de la que se informa en un comunicado oficial.
Explicó que fueron «las circunstancias de seguridad en Israel y en la región las que llevaron a la importante decisión de construir una verja en la frontera» con Egipto, tratando de distinguir entre la barrera del Sinaí y la que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quiere construir con México.
La conversación se produce después de tres días de crisis diplomática entre ambos países y de que Netanyahu difundiera el sábado un tuit en el que supuestamente apoyaba la decisión de Trump de construir un muro en la frontera.
«El presidente Trump está en lo correcto. Yo construí un muro en la frontera sur de Israel. Paró toda la inmigración ilegal. Gran éxito. Gran idea», escribió el primer ministro sin matizar a qué se refería exactamente, lo que provocó un fuerte encontronazo diplomático.
Netanyahu dijo posteriormente que no se refirió en ningún momento al muro entre México y Estados Unidos, y ha acusado a los medios de comunicación «izquierdistas» de deformar su mensaje.
«Aprovecharé esta oportunidad para explicar o aclarar lo que dije y no dije en mi tuit de la otra noche», expuso hoy durante la inauguración de la feria Cybertech, uno de los mayores eventos mundiales del sector.
Aseguró que hablaba del «notable éxito de la valla de seguridad de Israel» sin comentar sobre las relaciones entre Estados Unidos y México.
«Tuvimos y seguiremos teniendo buenas relaciones» con el país y su presidente, Enrique Peña Nieto, y opinó que los lazos que les unen «son más fuertes que cualquier desencuentro pasajero o malentendido».
Un ministro de su gobierno, Arie Deri, le instó el lunes a disculparse ante México, después de que líderes de la comunidad judía de ese país le pidieran interceder ante Netanyahu.
Hoy lo ha hecho Rivlin para tratar de poner fin a la crisis y explicarle a Peña Nieto que «nadie trató de comparar entre la situación de Israel y la de México».
«Se trata de un malentendido. Nuestras relaciones son tan importantes y estrechas que tenemos que dejar atrás cualquier malentendido que se haya producido», le dijo.
Rivlin también «lamentó» cualquier «daño» que produjera el malentendido y matizó que estaba seguro de que «podemos dejarlo atrás».
El comunicado oficial, redactado en hebreo, indica que Peña Nieto le respondió que el contenido del mensaje «no dejaba margen a la interpretación» y que éste «había generado numerosas reacciones» en México, por lo que «era inevitable nuestra petición de explicaciones» a Israel.
«Quiero destacar que México siempre ha estado y estará interesado en unas estrechas relaciones con Israel. México quiere seguir las buenas relaciones que, lamentablemente, se vieron dañadas por el tuit», señala la nota presidencial israelí.
Según el comunicado, en la llamada Rivlin reiteró la invitación que hizo el pasado septiembre a su colega mexicano, durante los funerales de Simón Peres, para que este año realice una visita de Estado de Israel.