Las denuncias que realizaron los trabajadores de la salud, fue por carencia de insumos y medicamentos en el Hospital José G. Parres

Médicos que denunciaron carencia de insumos y medicamentos en el Hospital José G. Parres fueron despedidos, presuntamente como represalia de la Secretaria de Salud, Patricia Mora González, y la titular de los Servicios de Salud de Morelos, Giorgia Rubio Bravo.

El dirigente del Sindicato Independiente de Salud sección 6, Agustín Benítez Toledo, acusó que por venganza fue despedido el personal que denunció las carencias que enfrenta para atender a los pacientes que llegan a solicitar atención médica.

Dijo Mora González rescindió el contrato de trabajo a él y otros cinco secretarios de la organización gremial y, en menos de un año despidió a más de 300 personas, entre enfermeras, médicos, administrativos y del programa de vectores, situación que complica más la atención de paciente.

Explicó que la falta de personal e insumos obliga a los pacientes en el área de urgencias tienen que esperar de 24 a 72 horas en los pasillos sentados en sillas hasta que les asignen una cama, y los anaqueles de medicamentos están vacíos.

Además, detalló que promovió una queja ante la Comisión Federal de Protección contra Riesgo Sanitarios la compra de vacunas caducas, suero antialacrán y antibióticos falsos, y alertó que existen malos manejos económicos y actos de corrupción en la Secretaría de Salud, por lo que presentará una denuncia en la Procuraduría General de la República.