El campeón mexicano contrajo matrimonio en la Catedral de Guadalajara, misma ciudad en la que el boxeador tiene un lujoso rancho, sitio en el que se realizó la fiesta
El pasado fin de semana, el boxeador mexicano Saúl “Canelo” Álvarez unió su vida junto a la de Fernanda Gómez, la madre de su hija María Fernanda y la mujer con la que mantenía un noviazgo estable. La unión civil de la pareja pretendía realizarse en secreto, situación que se filtró gracias al contenido difundido en plataformas digitales.
Con esta experiencia, el Canelo solicitó a sus distinguidos invitados que no realizaran transmisiones en vivo para que los momentos más especiales de su unión religiosa y su fiesta fueran privados e íntimos. Sin embargo, esto tampoco fue posible, pues era imposible que los detalles de tan exorbitante evento permanecieran ocultos.
El campeón mexicano contrajo matrimonio en la Catedral de Guadalajara, misma ciudad en la que el boxeador tiene un lujoso rancho, sitio en el que se realizó la fiesta. Con personajes como Prince Royce, J Balvin, Maná, Los Ángeles Azules y la banda El Recodo como parte de la lista de invitados y el repertorio musical, Saúl y Fernanda no escatimaron en gastos para disfrutar del día más feliz de sus vidas.
La iglesia estuvo repleta de flores y velas blancas, al igual que la recepción del rancho, donde se podían observar largos arreglos con rosas blancas que hacían juego con el elegante vestido de Fernanda Gómez, diseñado por Elie Saab Haute Couture. Los tonos en los que se presentó la decoración fueron dorado, blanco y palo de rosa.
Este último también fue el color elegido para vestir a María Fernanda, la hija de los ahora esposos. La menor fue una de las protagonistas de la noche, pues portó un diseño exclusivo de la marca Sofía’s Closet, dedicada a la elaboración de piezas infantiles que ascienden hasta los cien mil pesos.
Además del repertorio musical antes mencionado, la mañana siguiente al 22 de mayo, mientras la fiesta continuaba, el mariachi llegó al rancho para interpretar las canciones favoritas del boxeador y la modelo. Tan solo para complacer a sus invitados con música en vivo de la mejor calidad, el Canelo pagó casi medio millón de dólares.
El lujoso menú de cuatro tiempos estuvo conformado por tártara de res, crema de alcachofa, costilla de res con puré de papa, verduras parrilladas y una gran variedad de postres. Respecto a la diversidad del bar, las bebidas que estaban disponibles para los invitados eran vino tinto, blanco y rosado, champagne, tequila, whiskey, coñac y vodka.