Un autobús que transportaba varios miembros de la guardia presidencial tunecina explotó mientras estaba estacionado cerca de una vía principal
Al menos 12 personas han muerto y 14 han resultado heridas al explotar un autobús de la seguridad presidencial en el centro de Túnez, el martes por la tarde. El mayor número de muertos corresponde a oficiales que viajaban en el vehículo.
Se trata de un terrorista suicida que ha hecho estallar la bomba desde dentro del vehículo, según relatan a Reuters, fuentes cercanas a la presidencia.
El estallido se ha producido en la Avenida Mohamed V, una de las arterias principales de la ciudad, el martes a las 17.30 horas, hora punta en la capital tunecina, cerca de la antigua sede de la RCD, Agrupación Constitucional Democrática, del ex-dictador Zinedin el Abedin Ben Ali, derrocado en la llamada ‘Revolución del Jazmín’ de 2011, con la que brotó el salafismo radical en Túnez.
Las fuerzas de seguridad han cortado el tráfico en la zona y están investigando el origen de la explosión. Varias ambulancias se trasladaron al lugar de los hechos en cuento estalló el vehículo. Según relataban varios testigos a la agencia EFE, aunque todavía no se ha podido confirmar, “un suicida hizo estallar una bomba cuando el autobús pasaba frente a la sede de antiguo partido del dictador”.
El número de muertos no es definitivo y fuentes del gobierno tunecino estiman que podría aumentar. Tampoco se conoce el número de oficiales que viajaban en el interior del autobús y si todos los muertos provienen de pasajeros o también entre las víctimas hay transeúntes que pasaban por la arteria Mohamed V, una de las más transitadas de la capital.
La explosión se ha producido 10 días después de los atentados de París y de que las autoridades tunecinas aumentaron el nivel de seguridad en la capital desplegando un número elevado de fuerzas de seguridad.
A principios de noviembre, las autoridades tunecinas anunciaron el desmantelamiento de una célula que planeaba ataques terroristas en las estaciones de policía y los hoteles de la ciudad, junto al mar de Susa, a unos 150 kilómetros al sureste de Túnez.
En los últimos dos meses, Túnez ha desmantelado 10 células terroristas y detenido a más de 50 sospechosos.
Es el tercer atentado que golpea con fuerza al país del norte de África. El 26 de junio, murieron 38 personas, la mayoría turistas, en los tiroteos provocados por yihadistas afines al Estado Islámico, en un hotel de lujo situado en Susa. El 18 de marzo, extremistas islámicos atacaron el Museo Bardo, en la capital de Túnez,quitando la vida a 22 personas. El turismo en Túnez se ha visto fuertemente amenazado este año, tras los atentados terroristas.
Túnez es el país que mas combatientes ha aportado al Estado Islámico. Al menos 3.000 tunecinos forman parte de sus filas en Siria e Irak.
El Gobierno español ha condenado el atentado terrorista en Túnez y ha reafirmado su apoyo a las autoridades en su lucha contra la lacra global del terrorismo.
El Ejecutivo, en un comunicado difundido por el Ministerio de Asuntos Exteriores, traslada “su honda condolencia” a los familiares, allegados y compañeros de los fallecidos y al gobierno de Túnez.
El titular de Exteriores, José Manuel García-Margallo, afirmó que “no parece que haya víctimas españolas” en el atentado.