El trabajo multidisciplinario del personal médico del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de la Unidad Médica Santa Cecilia y la fortaleza de la paciente Leonor, de 97 años, se conjugaron para derrotar la enfermedad de COVID-19.
Doña Leonor ingresó el 5 de noviembre a la unidad médica operada en comodato por el IMSS en Monterrey, Nuevo León, y su caso fue considerado de alto riesgo ante complicaciones por sus antecedentes crónico-degenerativos de hipertensión arterial y su edad avanzada.
El Equipo de Respuesta COVID del Hospital Santa Cecilia realizó una valoración geriátrica integral con ajuste de medicación, oxígeno, terapia, ejercicios respiratorios y movilización temprana, acorde a las necesidades y a la edad de la paciente.
El personal de salud mantuvo una vigilancia estrecha de parámetros respiratorios y hemodinámicos, antibióticos y ello permitió una evolución favorable hasta retirar el oxígeno suplementario y completar su tratamiento hospitalario, por lo que se determinó su regreso a casa.
Con voz apacible y actitud positiva, doña Leonor dijo sentirse contenta y agradecida. “Tantas gracias a todos y a todas, me voy muy contenta con todos sus servicios, todos me vieron muy bien. Todo lo que hacen es mucho sacrificio por los enfermos, que Dios se los pague”, expresó.
La paciente aseguró no saber cuál podría ser el secreto para vivir muchos años, pero pese a tener una pierna adolorida por una cirugía, sigue activa.
“Me siento bien, yo todavía me levanto a lavar y a asear mi cuarto. También puedo hacer comida, tengo andadera para andar con las dos manos y tengo bastón para hacer con una mano y así”, comentó.
Al abandonar el hospital Santa Cecilia la paciente de 97 años recibió aplausos del personal, que bajo las normas de la sana distancia, formó una valla para despedirla y celebrar su recuperación.
Sorpresa, admiración y alegría causó en el hospital la fortaleza de doña Leonor que ganó la batalla al COVID-19.
La doctora Cinthia Mariel Mota Guzmán, médica anestesióloga, líder del Equipo de Respuesta COVID del turno matutino, dijo que el caso de doña Leonor fue un reto para el personal médico, pues no habían atendido a una persona de esa edad en esta unidad médica del IMSS.
“Afortunadamente contamos con la asesoría geriátrica, así que hubo un manejo interdisciplinario, complementamos la experiencia tratando pacientes COVID-19 con los conocimientos de la especialidad en geriatría; era muy necesario mantener la estabilidad de la paciente; fue importante el tratamiento integral”, explicó.
Para la doctora Liora Elizabeth Barra Farfán, médico general y también parte del Equipo de Respuesta COVID, platicar con doña Leonor durante sus jornada de trabajo fue una grata experiencia.
“Cuando la ves, es como si se te reflejara algún pariente tuyo, tu abuelita, tu abuelito… causa ternura, son los extremos de la vida, la ves más frágil, pero a la vez muy fuerte”, concluyó la doctora.