No sólo se trata de que un galán nos caiga mal o bien. Muchas veces somos un poco más quisquillosas que eso, por lo que recopilamos algunos motivos para ver si te sientes identificada
El mundo de las citas no es nada de fácil. Encontrar a esa media naranja que complementará nuestras vidas cuesta, y harto, pese a que en el último tiempo aplicaciones como Tinder o Happn han sido de gran ayuda para las solteras.
Es que esos primeros encuentros no garantizan para nada el éxito de una relación. Y de hecho, hay que reconocer que varias veces salimos arrancando apenas conocemos más a fondo a ese galán virtual o el clásico ‘amigo del amigo’ que nos presentan.
Pero, ¿cuáles son los motivos que pueden llevarnos a rechazar a un hombre luego de un primer acercamiento? La revista Marie Claire enumeró algunos que te contamos a continuación.
Deja escapar a ese galán
Es demasiado metrosexual
Sí, nos gusta que se arreglen, pero que pasen más tiempo que nosotras frente al espejo definitivamente no es un buen indicador.
“El pelo engominado en exceso, un tono bronceado (falso) todo el año, las gafas de sol en cualquier momento, los vaqueros skinny y las camisetas con cuello en V y un escote demasiado pronunciado… ¡ADIÓS!”, dicen desde Marie Claire.
No escucha a nadie más que a él
Le tratas de contar parte de tu vida y siempre termina hablando de la suya. Este tipo de galán jamás será capaz de ponerle atención a tus historias ni menos a tus problemas.
“Solo habla y habla de sí mismo; o peor, hace como que nos está escuchando y luego, cuando le preguntamos algo, no sabe qué le hemos contado en toda la noche”, alertan desde la publicación española.
No conoce el desodorante ni el pudor
El otro extremo del metrosexual. Ese hombre que con suerte conoce el champú y parece bañarse una vez por semana, se lanza gases delante de ti o se hurga la nariz en público, definitivamente no es lo que estás buscando.
Desde Marie Claire afirman: “no hay nada menos excitante que el mal olor corporal, y es uno de los principales motivos por los que las mujeres afirman no sentirse atraídas por un hombre”. Así que ojo.
Alardea sin parar de su vida sexual
¿Apenas lo conoces y ya te está comentando qué es lo que mejor hace en la cama? ¡Sal de ahí!
Ya sea por inseguridad, egocentrismo o lo que sea, ese hombre que se jura un dios de las artes amatorias no será por ningún lado un buen partido. Ya lo dice el dicho: “mucho ruido y pocas nueces”, ¿o no?
Habla de trabajo o de su mamá
¿Qué es peor: un trabajólico o un hijito de mami? ¡Ambos! Así que, si conoces a un tipo que sólo es capaz de hablarte de su adicción al trabajo o de la profunda cercanía-dependencia que tiene con su madre, está más que claro que terminarás rechazándolo.
“Su madre tiene una llave de su casa, a la cual puede entrar sin llamar al timbre cuando quiera, claro está, y te exige que tienes que adorarla igual que él. Pues no, gracias, una suegra así no es con lo que soñamos”, indican desde Marie Claire.
No tiene sentido del humor
“Ya sea porque intenta intelectualizar todo o tiene menos gracia que escuchar a tu tío contando chistes. Al final, terminarás agotada de cualquier intento de mantener una conversación con él”, comentan desde la revista en su versión web.
Por eso, si tu cita no tiene ni una cuota de esa chispa que te hace sonreír y conectarte, lo mejor es que lo dejes ir. Y bien lejos.