El boxeo también tiene esos intangibles que muchas veces pasan inadvertidos, algún día un peleador puede estar ante el combate más millonario de su carrera y al otro día puede estar entregando pavos a familias de escasos recursos en su tierra natal, ah, y en el proceso, también puede ir heredando sus conocimientos al futuro de este deporte.
Hablamos de Miguel Cotto, quien en su preparación para el duelo ante Canelo Álvarez del pasado 21 de noviembre recibió la ayuda del exolímpico estadounidense José Ramírez y como pago le dio algunos consejos que el californiano de padres mexicanos ha aceptado con mucho honor y orgullo.
«Hace tiempo me invitó Freedie Roach (su actual entrenador) a hacer sparring cn Manny Pacquiao en Filipinas porque se iba a preparar para Chris Algieri, tenía que pelear como Algieri para que le sirviera a Pacquiao, más movido, pero cuando me dijeron de hacer sparring con Miguel Cotto dije que sí sin dudar, y al final me gustó más, boxeaba más a mi estilo, como Canelo, moviendo la cintura, tirando, yendo al frente, tirando al cuerpo, fue una experiencia muy bonita», recordó Ramírez, de 23 años y marca profesional de 15-0 y 12 nocauts».
¿Lo mejor de hacer sparring con Cotto?, le preguntamos. «Que él y su equipo quedaron contentos, y que Miguel me enseñó cosas extras, siempre es una motivación grande y bonita, porque yo a él lo veía en televisión y trabajar con él es un honor, le gustó como tiro el jab, el gancho al hígado y a la quijada, me pidió hacer un poco de más ángulos para evitar el contragolpe, son cosas que quizá uno sabe que se olvidan y s alguien como él te lo recuerda lo valoras», respondió.
Ramírez, original de Avenal, California, de padre mexicalense y madre michoacana, combatirá este sábado ante Jhonny García (19-3-1, 11 KO) en el evento estelar de la cartelera de Top Rank que transmitirá Unimas. Será su tercera y última pelea del año.
«Ha sido un año de poca actividad, tuve una lesión en un dedo de la mano derecha, me lastimé mi ligamento durante una sesión de sparring, cancelamos una pelea en septiembre y estamos tratando de terminar el año bien mandando un mensaje de que aquí estamos y que podemos ir a pelear ya a 10 rounds», adelantó el olímpico en Londres 2012.
Ramírez es parte de ese grupo de olímpicos que firmó Top Rank al lado de Óscar Valdez, de México, y Félix Verdejo, de Puerto Rico, pero mientras ellos avanzan con pasos agigantados, él prefiere ir a su ritmo, sin presionarse. «M papá me dijo que no hay que llegar primero sino que hay que llegar para quedarse, sé de mi talento, de mis ganas de ser campeón del mundo, confío en mi equipo, tengo mucha fe en que vamos a lograr ese objetivo», apuntó.