Después de 314 días, los españoles tienen un nuevo gobierno gracias a la abstención de los socialistas

Después de 314 días, España tiene gobierno. Mariano Rajoy fue elegido Presidente por una mayoría simple del Congreso español y gracias a la histórica abstención del Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

170 votos a favor, 68 abstenciones y 111 noes. Ése fue el resultado de la votación que convirtió al líder del conservador Partido Popular (PP) en Presidente. A las 20:23 (hora de España) finalizó la sesión en la que todas las miradas estaban puestas en el grupo socialista; había dudas sobre el número de diputados que romperían la disciplina de voto y que no se abstendrían en favor del gobierno de Rajoy. Al final fueron 15 los díscolos que votaron por el “No”, 7 de ellos del Partido Socialista de Cataluña (PSC).

A la sesión de investidura asistieron 349 de los 350 diputados. La curul que quedó vacía era la del exlíder Pedro Sánchez, quien unas horas antes había renunciado a su acta como diputado para no verse obligado a abstenerse, tras varios meses defendiendo su rotundo “no es no” a Rajoy.

Hicieron falta dos elecciones, seis intentos de investidura (dos del socialista Pedro Sánchez; y cuatro de Rajoy), varias rondas de consultas con el rey Felipe VI; un sinfín de acuerdos, desacuerdos y especulaciones y, sobre todo, una crisis de grandes proporciones en uno de los dos principales partidos de España, el PSOE, que terminó con la dimisión de su dirigente.

Acaba una larga y convulsa etapa de interinidad y comienza una nueva legislatura española que se pronostica corta y muy difícil. Mariano Rajoy gobernará en minoría y tendrá los apoyos legislativos necesarios para sacar adelante sus reformas. Necesitará de la complicidad de otras fuerzas políticas.

En su discurso, un Mariano Rajoy conciliador tendió la mano al diálogo, pero dijo que “es responsabilidad de todos” que la legislatura que inicia sea duradera.

El portavoz del PSOE, Antonio Hernando, justificó que la abstención de su partido era “por responsabilidad” y “para evitar las terceras elecciones”. Y le advirtió a Rajoy que “vigilarán cada paso que dé”.

Pero esa labor de feroz oposición que anunció Hernando no les será tan fácil. Unidos Podemos, en voz de su líder, Pablo Iglesias, se erigió como jefe de facto de la oposición y vaticinó que ésta será la última legislatura de Rajoy. “Ahora nos toca estar en la oposición. Buena suerte en su epílogo, señor Mariano Rajoy”.

El momento más áspero de toda la sesión lo protagonizó el joven diputado de Esquerra Republicana de Catalunya, Gabriel Rufián, quien en su intervención lanzó durísimas críticas a la bancada socialista: “Traidores es el único nombre que merecen”.

Mientras todo esto sucedía dentro del Congreso de los Diputados, muy cerca, por varias calles del centro de Madrid, discurría una manifestación en contra de la investidura de Mariano Rajoy.