En Aguascalientes se requieren más bosques urbanos, pues existe mucha plancha de concreto y en época de calor, la gente lo reciente más, asimismo, si llueve no se filtra el agua explicó Vicente Díaz Núñez, gerente estatal de la CONAFOR, quien dijo: “Tenemos en promedio 4 metros de área verde por persona, cuando la ONU dice que el promedio debe ser de 7 metros cuadrados”.
Aunque se tienen tres bosques urbanos principales y grandes en la ciudad: Centro de Educación Ambiental Rodolfo Landeros con 94 hectáreas; el Centro de Educación Ambiental de El Cedazo, con 48 hectáreas, y también se involucró el espacio de La Pona y sus 34 hectáreas, con los cuales la CONAFOR está trabajando en un estudio, documento, en el cual se integrará la superficie real que se tiene en Aguascalientes de bosque urbano.
Mediante dicho estudió se sabrá cual es la problemática a la que se enfrenta el arbolado que se tiene en las tres zonas antes mencionadas, por lo cual el gerente estatal de la delegación recalcó: “Los hongos e insectos causan la muerte de los árboles”. Por lo cual hizo hincapié en que esto se debe cuidar, porque se necesita de más área verde, por las extensas zonas de complejos construidos y arroyo vehicular.
“Nosotros hasta el año pasado tuvimos influencia en los bosques urbanos, esto con la modificación a los estatutos. Estamos dentro de los estados con mayor área verde, lo que necesitamos son estrategias para que nuestros bosques se encuentren en condiciones. Asimismo algunos terrenos que están como lotes baldíos pudiéramos generar espacios verdes, para que esa mancha verde. Hay lotes baldíos que tienen más de 2 mil metros cuadrados, pudieran fácilmente convertirse en espacios verdes, por lo que será una de las metas que estaremos trabajando para el 2017”.
En tema aunado, además de la protección de áreas verdes, el entrevistado indicó que también otros de los tópicos trascendentes, uno de ellos, es la cacería no regulada, porque en Aguascalientes se daba esto, ejemplo de ello es que en los años 70, el guajotote Silvestre se extinguió y tuvo que recuperarse, así que hubo una labor de reintroducción en 1994 y ahora su especie consta de 10 mil que se trajeron de Durango y Chihuahua.
Actualmente este animal se sigue cazando al igual que el venado cola blanca. La temporada de caza del guajolote silvestre es durante el mes de abril y se dan 45 días, por su parte, la del venado comienza en principios del mes de noviembre y termina a finales de diciembre.
*Con información de Aguasdigital