Desde que en mayo salió a la venta Lemonade, el último disco de estudio de Beyoncé, la cantante no ha parado. Con tanto concierto y tanta promoción, la diva se merecía unas vacaciones para relajarse junto a Jay-Z, en donde fue captada saltando al mar desde la cubierta de un yate anclado en las costas de Cerdeña (Italia).

De acuerdo con el Daily Mail, de 30 pies (aproximadamente 10 metros) fue la altura que tuvo el clavado que realizó la estrella, quien hasta lució un modelo de traje de baño similar al que se colocan las deportias para saltar a las piscinas.

Beyoncé tiene al alcance de su mano todo lo que quiere: un yate de lujo que la pasee por las aguas del Mediterráneo y un hotel de cinco estrellas para tomar el sol mientras saborea la gastronomía italiana.