En la reestructura de la administración también se contempla la desaparición de 54 subsecretarías del gobierno central y la eliminación de 21 organismos del gobierno paraestatal

Luego de la polémica por la salida de varios de los funcionarios de primer nivel y en busca de un ahorro anual cercano a los 500 millones de pesos, el gobierno de Nuevo León oficializó una reestructura en su administración con la fusión y eliminación de dependencias.

Tras la presentación de la Reforma de la Ley Orgánica de la Administración Pública del estado se anunció la salida de unos 700 empleados.

El evento se realizó en las instalaciones de Palacio de Gobierno y estuvo encabezado por el propio jefe del ejecutivo estatal, Jaime Rodríguez Calderón, alias “El Bronco”.

Presentó un total de 88 propuestas de cambios a la ley con la que se plantea un ahorro de entre los 400 y 500 millones de pesos anuales.

“Setecientos es el 30 por ciento del personal que podemos cambiar”, sostuvo el mandatario.

Las bajas de empleados se darán una vez que el Congreso apruebe la reforma por lo que las mismas podrían iniciar después del 15 de marzo.

El Coordinador Ejecutivo, Fernando Elizondo Barragán, expuso que la reestructura comprende la desaparición de 54 subsecretarías del gobierno central y la desaparición de 21 organismos del gobierno paraestatal.