1.Desayuna. Para empezar a acelerar el metabolismo, es necesario comer algo nutritivo a primera hora del día.

Debe ser no más de una hora después de levantarte, para que, de esta forma, le de energía al cuerpo y comience a trabajar con el alimento.

2.Incrementa la ingesta de proteína. Cuando comes proteína, te sientes satisfecho por más tiempo, mientras que tu metabolismo sigue trabajando y quemando grasa.

3.Toma infusiones y tés. Tomar bebidas calientes durante el día ayuda a acelerar el metabolismo; además, el té tiene antioxidantes que luchan contra las grasas…

Si eres cómplice de los sabores dulces, puedes utilizar endulzante son calóricos que está comprobado no tienen ninguna repercusión en tu organismo.

4.Ejercicio. La actividad física hace que nuestro ritmo cardíaco aumente y mantengamos los órganos activos por más tiempo.

La mejor forma para acelerar el metabolismo es alternando momentos de alta intensidad con otros más relajados.

5.Come semillas entre comidas. Comer 10 almendras entre comidas saciará tu ansiedad por comer algo y además son buenas para el cabello, la piel y los niveles de energía.

Los aceites que se obtienen de las semillas son capaces de crear un equilibrio entre ácidos grasos Omega 6 y Omega 3 en el cuerpo.

6.Realiza 5 comidas al día. Evita que tu cuerpo se quede en ayunas por mucho tiempo, ya que después de 4 horas de ayuno…

tu cuerpo comienza a consumir glucosa que tu cerebro necesita, lo que lo deja sin combustible.

7.Toma agua. La recomendación es tomar agua simple, sin embargo es difícil la transición de refrescos y jugos al agua sin azúcar.

En este caso la opción es que intentes disfrutar de tus bebidas con endulzantes no calóricos para llenar de sabor esas bebidas.

8.Cena ligero. Ya que durante la noche pasamos varias horas en ayuno y sin movernos y el cuerpo acumulará la mayor cantidad de grasa que pueda.

Pequeñas acciones harán que no sea difícil bajar de peso o no subir. Con información de cortesía.